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jueves, 9 de enero de 2014

LA DIADA DE SANT JORDI

El denominador común a las fotografías de hoy es la celebración de la Diada de Sant Jordi, patrón de Cataluña. Unas me traen recuerdos, otras me hacen imaginar y el resto nos reflejan como fueron las celebraciones de esta ciudad hace algunos años.

Empezaré por una en la que la florista podría ser la madre de Ricard, gran persona que se ha pasado toda su vida y es parte importante de la empresa 'Plantas Navarro' de la calle Valencia. Puede que no lo sea, pero tiene cierto parecido y eso -junto al año y que era florista- me ha hecho imaginar que... Cuando vaya se la enseñaré y saldré de dudas.

1945 - Celebración Diada de Sant Jordi

1916 - Celebración Sant Jordi en el Palau de la Generalitat.

1933 - Stand de la Librería Española.

1953 - Librería Jaimes en la Diagonal. 

Por cierto, puesta a imaginar, mi padre tuvo un coche como ese que está aparcado a la puerta. 
¿Sería el suyo?... Como vivía enfrente...
Y pasando al terreno de los recuerdos, en esa librería y años más tarde, compraba todo el material y libros para el cole al que iba.

1977 - Diada Sant Jordi en las Ramblas con sus stands de libros y rosas rodeados por una auténtica marea de gente arriba y abajo.

Para los que no lo sepáis, desde mediados del siglo XV, el 23 de abril se celebra cada año en Catalunya la Diada de Sant Jordi, patrón de Cataluña desde el año 1094 y es, para los catalanes, el héroe protector que según la leyenda venció al dragón y salvó a la princesa, símbolo de la victoria sobre el mal. Es una fiesta alegre y vistosa en la que las callas se llenan de cientos de paradas de flores y libros.

A lo largo de los años, se ha consolidado como una fiesta tradicional y emotiva en la cual se intercambian entre parejas, hijos, padres y madres una rosa y un libro. Es una fiesta popular y colorista, que exalta unos valores tan humanos como son el amor, la cultura y, como no, la tradición y costumbres catalanas.

Durante los años del franquismo, la Diada de Sant Jordi se intentó camuflar bajo el superpuesto nombre de "El día del Libro" y desaparecieron las cintas con la senyera de los tallos de las rosas. Lo segundo es comprensible, lo primero no.

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