Imponente, destacando sobre todo su entorno, en plena avenida Diagonal, en el número 423, se levanta uno de los últimos edificios del modernismo de Barcelona. Justo en la esquina con la calle Enric Granados surge un edificio modernista tardío, construido en el año 1918, cuando ya casi ningún arquitecto trabajaba ese estilo.
La obra fue firmada por Gabriel Borrell, pero es del arquitecto y escritor Manuel Sayrach, hijo del promotor del proyecto el que realmente realiza la obra. Sayrach hijo no tenía la carrera acabada cuando concibió este impresionante edificio que denota la clara influencia de Gaudí en el uso de las líneas curvas y la exquisita decoración interior. Podríamos decir que esta gran casa es la herencia de todo aquello que los maestros del estilo habían hecho hasta aquel momento en Barcelona.
La Casa Sayrach es un edificio liviano, más liviano que los clásicos modernistas y, debido a ello, tremendamente elegante. Para mi, esa elegancia y belleza radica en la contención de las formas curvas que caracterizan la fachada y en la ausencia de sobrecargados elementos decorativos tan típicos de los modernistas.
El edificio se articula con eje semicircular e la esquina coronado por una hermosa torre o templete de color blanco y un remate de azotea completamente gaudiniano. También destaca la composición de la planta principal con una tribuna y balcón corrido entre columnas a modo de galería con grandes ventanales. Su vestíbulo y escalera son impresionantes al estar profusamente decorados.
La primera vez que entras en el edificio, os puedo asegurar que tardas 15 minutos en llegar a la escalera o ascensor. Hay tantos detalles que ver... el conserje está más que acostumbrado a que la gente se queda anonadada y te observa orgulloso de poder estar y trabajar en ese lugar.
1 comentario:
Sin palabras simplemente maravilloso, me encantaría visitarlo, se puedr?, dsoy una persona con una discapacidad de 87% tengo que ir acompañada es posible?, gracias
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