Las Cuatro Columnas simbolizan las cuatro barras de la bandera -senyera- catalana y estaban destinadas a convertirse en uno de los símbolos del catalanismo. Debían estar coronadas por figuras representativas de cuatro victorias: las ciencias, las letras, la industria y el comercio que no llegaron a construirse. La columnas fueron derribadas en 1928 durante la dictadura de Primo de Rivera.
Durante este periodo se eliminaron de forma sistemática todos los símbolos públicos del catalanismo para que no tuvieran el eco que les podía dar la Exposición Internacional de 1929 que tenía que celebrarse en Montjuïc.
Por el mismo motivo, la dictadura nombró como Pueblo español, ubicado en la misma montaña, a lo que en un principio tenía que llamarse "Iberona" en homenaje a los íberos, primeros pobladores de las tierras catalanas. También se dio el nombre de Plaza de España a la plaza, hasta entonces llamada Arenas, situada a los pies de la montaña, en la que se colocaron las dos torres venecianas.
Las Cuatro Columnas son unas columnas exentas con capiteles jónicos, obra del arquitecto Puig i Cadafalch, que se levantaron en 1919 en el lugar que hoy en día ocupa la Font màgica de Montjuïc.
A finales del 2008, el Parlamento de Cataluña aprobó una proposición no de ley, con el apoyo de todos los partidos políticos, para promover la restitución de este patrimonio artístico de Cataluña, que fue concebido como homenaje a los patriotas catalanes.
En 2010 fueron reconstruidas a pocos metros de su ubicación original.
A finales del 2008, el Parlamento de Cataluña aprobó una proposición no de ley, con el apoyo de todos los partidos políticos, para promover la restitución de este patrimonio artístico de Cataluña, que fue concebido como homenaje a los patriotas catalanes.
En 2010 fueron reconstruidas a pocos metros de su ubicación original.
1919
1920
1921
1922 - Feria de Muestras.
1926
1928 - Demolición