CARRER FERRAN

La calle Ferran es una calle del distrito de Cuidad Vella en el Barrio Gótico de Barcelona, una calle paralela al mar, que se ha convertido una de las vías más emblemáticas de la ciudad. 

(A la izquierda, engalanada para las fiestas de La Mercè de 1889).

En 1824, se dió comienzo a su trazado rectilíneo que contrastaba con las callejuelas medievales de la zona. Desde 1910, enlaza la Rambla con la plaça de Sant Jaume, llegando hasta Via Layetana, y fue fruto de un proyecto del Ayuntamiento de Barcelona que pretendió unir la Rambla con el Parc de la Ciutadella, extremo que no llegó a realizarse entonces, ni tampoco después bajo el mismo nombre.

La calle fue bautizada como calle de Fernando VII de España, el borbónico "rey Felón" que se sentaba en el trono en aquella época. 
Sus tramos recibieron antes los nombres de Fernando y Fivaller, debido a ello, en 1910 fue rebautizada con el nombre de Calle Ferran (Fernando) pero sín números romanos.

Gracias a su apertura, la plaça de Sant Jaume es lo es en la actualidad, dió salida a los nuevos trazados de la calle Jaume I o Princesa y dejaron encaradas las fachadas de la Casa de la Caridad -Ajuntament- y el Palau de la Generalitat.

1900

1907

1915

1920

1968

Esta calle es una de las que más sabor conserva de la antigua Barcelona, de aquella Barcelona de principios del siglo XX, cuando los barceloneses se daban cita en ella para pasear y disfrutar de los escaparates de las elegantes tiendas de la zona que se habían ubicado en el selecto y exclusivo carrer Ferran; lo que sería el actual Paseo de Gràcia.

En la actualidad.